| Era un hombre que sufría mucho, los maltratos psicológicos y la ferviente
 posibilidad de obtener felicidad lo hizo escribir los poemas más tristes,
 los cuentos más melancólicos y lastimosos...
 Pero sabía algo más...
 Consejo para mis amigos los golpeados...
 Se dice que las emociones tiene una base neurológica, que es posible
 realizar mapas de la situación del miedo o del placer en el cerebro, según
 las emisiones de sustancias como el cortisol, la dopamina o la serotonina;
 ¿Pero yo me pregunto? ¿Es qué acaso necesitamos explicar científicamente
 nuestras emociones?
 Algunas veces resulta más sencillo hacerlo de esa manera que expresarlas
 naturalmente a los demás, ¿por qué nos resulta tan complicado? Sabemos que
 un buen estado de ánimo hace que nuestros juicios sean más benévolos con 
los
 demás y con nosotros mismos; favorece la memoria de acontecimientos
 positivos de nuestra biografía, nos hace pensar de manera más flexible;
 ayuada a nuestra capacidad creadora y nos hace menos dubitativos, he 
incluso
 algunos estudios han demostrado que la seguridad, el optimismo, y la fe en
 uno mismo están relacionados con la buena salud física, entonces me 
pregunto
 yo ¿por qué no darnos una pequeña oportunidad?
 La vida con un esquema positivo tiene una mayor resistencia inmunológica 
que
 quienes lo hacen negativamente, además recordemos que la felicidad esta en
 el disfrute de los pequeños placeres cotidianos y no en las grandes cosas
 que supuestamente nos enaltecen, sin embargo, pocas personas condicionan 
su
 bienestar a los pequeños disfrutes y siempre buscan aventuras imposibles,
 les daré un consejo que me ha servido, espero que le puedan sacar 
provecho:
 1) Hay que fomentar nuestra capacidad para reírnos.
 2) Echarle valor a la vida, aunque ésta no nos brinde mucho de su parte.
 3) No ensimismarnos y olvidarnos del entorno, en otras palabras conocernos
 mejor a nosotros mismos
 4)para ser feliz debemos abrirnos al exterior
 5)Ser optimistas aunque el pesimismo haga estragos de nuestro ser...
 Ustedes lo saben bien, yo lo sé bien y depende de la capacidad de amanecer
 (como dice la reina de un brillante castillo) que tengamos cada uno en lo
 personal.
 Platicando con un amigo que sufría de terribles depresiones, el hombre
 golpeado se dio cuenta también de algo.
 Algunas veces los maltratos son el resultado de la propia actitud que una
 persona mantiene en contra de otras, en otras palabras, lo que hacemos a
 otros se nos revierte de una forma u otra, traducido en acciones buenas o
 malas, depende de la cara que nos mostremos a nosotros mismos y a los 
demás.
 Si un hombre golpeado se lamenta todo el día que no tiene suerte, que no 
le
 va bien en la vida, que no puede hacer las cosas, que no siente nada de
 nada, entonces sería necesario que pusiera en práctica algunos consejos
 esenciales
 
 Decálogo del afortunado.
 1) Pon atención a tus pensamientos. Si constantemente alimentas ideas
 negativas o morbosas, y permites que una voz interna te susurre a menudo
 frases de estilo de "Algo malo va a pasar", o "Seguro que no puedo
 conseguirlo", estás proporcionando internamente el que todo eso que temes
 llegue a ocurrir. Y es que lo estas llamando a gritos.
 2) Las pautas de comportamiento habituales son el resultado final de un
 proceso que comienza con los pensamientos, sigue con las palabras, 
continúa
 con los actos y cristaliza en las actitudes con las que habitualmente nos
 movemos ante la vida. Si queremos cambiar algún comportamiento 
especialmente
 dañino y negativo para nosotros, debemos tener en cuenta esta secuencia.
 3) Tenemos derechos a ser felices. Ya es tiempo de convencernos de que
 realmente lo merecemos. Este mundo no tiene por qué se un valle de 
lágrimas,
 salvo que nos empeñemos en que así sea y actuemos en consecuencia para
 lograrlo.
 4) No estamos aquí para hacer lo que los demás esperan de nosotros, sino
 para bailar al ritmo de nuestra personal, única y perfecta armonía. 
Descubre
 qué quieres hacer realmente y pon manos a la obra. Todas las adicciones,
 tanto físicas como emocionales (porque se puede ser adicto a relaciones
 afectivas que nos dañan igual que un droga) tienen su raíz en las
 dependencias que nos creamos, sean éstas del tipo que sean.
 5) Nadie da lo que no tiene. Quien no se ama a sí mismo, es incapaz de dar
 amor a los demás. Quien no se tolera, no puede ser tolerante. Quien no se
 acepta internamente tal como es, será incapaz d aceptar a los otros. El 
que
 nos se desea lo mejor, siembra es su entorno su rabia y su frustración...
 que le son devueltas multiplicadas.
 6) La raíz del sufrimiento está en la ignorancia. Como bien saben los
 budistas. Para los griegos -estar bien- era igual que -obrar bien-. 
Llamaban
 Kalogatia al vínculo entre la ética y la estética e identificaban 
felicidad
 con conocimiento. La mala o la buena fortuna depende, en gran medida de la
 capacidad para comprender lo que nos sucede, así como de saber integrar
 todas las experiencias. Recuerda que no puedes controlar ni dirigir los
 acontecimientos, pero sí puedes ser dueño de tus reacciones ante ellos.
 7) El sentido del humor es una estupenda manera de ayudarnos a nosotros
 mismos. Aquellas personas que siempre piensan antes de actuar y que se 
ríen
 antes de pensar, evitarán muchos errores. El yoga de la boca es la 
sonrisa:
 sonríe... es gratis. Y te sorprenderás de los efectos tan positivos que
 pueden encontrar si lo conviertes en algo habitual.
 8) Aprende a perdonar. El perdón es la forma más inteligente de liberarse
 del odio y del rencor, que separan y dividen; y nos fragmentan y 
envenenan.
 Todo esto se disuelve en el momento en que internamente perdonamos:
 literalmente en esta fracción de segundo nos liberamos del daño 
recibido...
 y de la persona que nos atacó.
 9) Las crisis son oportunidades de crecimiento. Si atraviesas un momento
 especialmente malo en cualquier aspecto de tu vida (económico, personal, o
 afectivo), recuérdate tan a menudo como puedas que puedes superarlo y 
salir
 fortalecido de la experiencia. Crisis, en japonés, se escribe con un
 ideograma que expresa, al mismo tiempo, -peligro- y -oportunidad-. Tú eres
 quien decide con cual de los dos sentidos quieres identificarte.
 10) Sé flexible. El junco se dobla con la tormenta y vuelve a erguirse una
 vez que ésta ha pasado, mientras que el tronco rígido se quiebra. La
 flexibilidad es el arte de fluir con la vida, de no oponer resistencia y 
de
 no alimentar tensiones. Te permite ponerte en marcha y detectar tanta
 aquello que te es favorable como todo lo que te limita.
 De modo que ahora mis amigos; el hombre golpeado y hombre depresivo han
 encontrado en lo más profundo de su ser las respuestas tan ansiadas que
 tanto necesitaban... ahora depende de ellos ponerlas en práctica.
 José Mauricio Sanchez Peña©
 
 MUCHAS GRACIAS AMIGO!!
 
 LUDY
 
 
 
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